Transformación: Recalibrando tu alma y tu ser

Cada vez que escribo siento que mi alma vibra y se siente libre. Hace ya aproximadamente 4 años que nació este blog y mi niña interior se siente tan contenta 😊.

Hoy es un día especial lleno de transformación y magia porque es luna llena en capricornio ese momento especial de cambios y transformaciones, de recalibrarnos, de limpiarnos y de volver a nuestra esencia.

Hoy quiero escribir sobre la transformación y lo que implica, podemos transformarnos en múltiples ámbitos de nuestra vida y siempre va a perdurar nuestra esencia. Transformación, según Chat GPT o Google hace referencia a ese proceso de cambio y proceso profundo por el cual transitamos nuestras vidas.

Para que exista una transformación tiene que existir el rompimiento de algo, una transformación implica un crecimiento y una mutación, es mudar de piel, dejar la piel que teníamos para darle nacimiento a algo nuevo dentro de nosotros.

Crecer, transformarse y adoptar una nueva forma duele. Es como cuando un niño crece, y los huesos empiezan a formarse, ese proceso de mutación a veces es doloroso. Somos seres humanos cíclicos; por lo cual la transformación es un proceso natural e inevitable por la cual hemos de pasar, para evolucionar y trascender.

La transformación se puede dar en múltiples facetas de nuestra vida, pero por lo general viene acompaña de cambios, donde lo cual nuestra resiliencia y capacidad de adaptación juega un papel importante. Al igual que nuestra capacidad de soltar, de desapegarnos y dejar ir. A todo esto, agrega la añoranza, el duelo, la tristeza que pueda acompañar a nuestros procesos de transformación y adaptación.

Cuando comienzas a saber observar cada una de estas emociones como propias de la naturaleza humana dejas de huir de ellas, las observas, las miras de frente y simplemente les abres la puerta para observarlas sin invitarlas a dormir en tu cama, convives con ellas, las escuchas y les muestras la puerta de salida.

En mi experiencia personal llevo aproximadamente 7 años con demasiados cambios en mi vida. Y cada uno de ellos tan valiosos como para darme esa formación de resiliencia y gestión interna. Empezando por una ruptura amorosa, por una experiencia propia personal y despertar espiritual, por un llamado de mi alma, por un deseo profundo de escuchar a mi intuición y espíritu, por un encuentro con mi propósito de vida, por dejar un estilo de vida que me dejaba limitada, por toparme nuevamente con mis propias heridas de niñez y creencias limitantes, por volver a sentir rechazo, por soltar una relación donde amas.

Cada uno de estos cambios y procesos me han traído miles y millones en enseñanzas. Donde cada uno de ellos me han llevado a lo mismo: la medicina eres tú y en ese proceso de recalibración y encuentro contigo no hay poder más grande que tu propia mirada y aceptación. Claro que hay procesos en los cuales necesitamos de un acompañamiento de un profesional o apoyo emocional.

Los cambios son parte esencial de la vida humana y muchas veces serán dolorosos, pero la buena noticia es que en esos momentos de vacíos encuentras tu propia vulnerabilidad y no hay manera más humilde de encontrarte contigo mismo si no es bajo tu propia vulnerabilidad. 

La vulnerabilidad indudablemente va a darte un regalo, que es el abrazo del alma para contigo mismo.

Si estas en un proceso de cambio solo quiero que sepas que no estás solo (a), nunca lo estarás y estos procesos son tan naturales y humanos que son necesarios transitarlos para la evolución y encuentro con tu alma, no sabemos cuánto duran, ni porque se presentan de cierta manera, pero son etapas de crecimiento y encuentros; encuentros profundos con tu ser.

Buscamos la manera de transformarnos por el exterior, saliendo de viaje, tratando de vivir alguna experiencia que nos lleve al límite de nuestro ser, cuando no hay ningún lugar a donde ir. La transformación está en la adaptación, entendimiento y aceptación de tu propia vida. La transformación siempre viene de adentro hacia afuera.

Tu transformación individual y crecimiento espiritual no te lo dara tu viaje a la India, ni la Ayahuasca, ni irte a encontrarte al exterior, ni el tapete, esa transformación profunda vendrá de una profunda observación y de simplemente VIVIR.

VIVIR arriesgándote, vivir sintiendo, vivir SIENDO, vivir abriéndote a las experiencias de tu corazón. VIVIR, VIVIR, VIVIR.

Y como vives ¿? Ve al mercado, visita a tus abuelos, plática con tus padres, empápate de tus ancestros, siéntete, deja de huirte, vive solo, haz lo que anhela tu corazón, súbete al metro, conoce a tus vecinos, ofrece gratis una vez lo que sabes hacer bien, sonríe, escucha, conócete, se humilde, obsérvate, haz el amor, ríndete, perdónate.

Hay múltiples maneras de experimentarnos como humanos, y recuerda que estamos en una práctica, amate tanto como puedas para compartir todo tu amor.

Con todo mi amor

Bediwa

El crecimiento personal no es un destino,

si no un viaje de continuo descubrimiento y transformación.